Las competencias laborales o habilidades laborales son todos aquellos conocimientos y habilidades que posee un individuo y que son necesarios para que se desempeñe de manera correcta una determinada actividad laboral.
¿Qué son las competencias laborales?
El término competencia laboral se utiliza para hacer referencia a las características de la personalidad de un individuo, devenidas en comportamientos que acarrean consigo un excelente desempeño a nivel laboral. Por ello, podemos comprender que existen empresas o puestos de trabajos, cuyo desempeño dependerá, de cierta forma, de la manera de la que se clasifican.
Ejemplo de competencias laborales
Las habilidades laborales se clasifican en tres grandes grupos:
- Competencias cardinales: Aplicables para todos los integrantes de una empresa y se relacionan con un objetivo específico en general. Ejemplos de este tipo de competencia laboral son: responsabilidad social, respeto y compromiso.
- Competencias específicas: Son las que se aplican a cada área en particular. Responden de manera concreta a las necesidades de la empresa, por lo cual, no siempre pueden ser aplicadas a la vida diaria. Entre estas competencias laborales encontramos: estrategias de productividad, manejo de crisis, eficacia técnica, entre otras.
- Competencias generales: Son más específicas que las competencias cardinales, y aplican para aquellos que poseen un rol en la organización y conducción de una empresa, institución, etc. Son aquellas que se encargan de la gestión eficaz del desempeño colectivo, como ser: liderazgo, comunicación asertiva, visión estratégica, entre muchas otras.
La importancia de la capacitación en las competencias laborales
Capacitar en el ámbito laboral es bueno no solo para los trabajadores, sino también para las empresas en sí. Esto permite mejorar el rendimiento empresarial, la moral del personal y los beneficios de los mismos. Entre estos últimos, se incluye un aspecto muy importante: La adquisición de nuevas competencias y habilidades laborales para los trabajadores.
Asimismo, esta capacitación les permitirá a los trabajadores recibir una formación que pueda llevarlos a mejores puestos de trabajo dentro de la empresa, ya sea con mejores perspectivas o una mayor remuneración.
Por tal motivo, es de gran importancia ir adquiriendo mayor número de competencias laborales, dado que esto puede brindar muchas oportunidades, tanto a nivel laboral como en aspectos personales de la vida diaria.
Las habilidades laborales más valoradas
- Adaptación al cambio: El salir de la zona de confort es un aspecto muy importante y que llama la atención de los empleadores. Las empresas se encuentran en constante cambio, por lo cual, buscan perfiles de individuos que sean capaces de amoldarse a esos cambios. De esta forma, podemos afirmar que el cambio implica evolución, por la cual, resulta beneficioso para el trabajador.
- Capacidad de aprendizaje: El interés de aprender es una actitud muy importante a tener en cuenta cuando se asume un nuevo empleo, principalmente porque la motivación que una persona demuestra por aprender es fundamental para los empleadores. Asimismo, la capacidad de aprendizaje permitirá que el trabajador crezca a nivel profesional, resultando importante para el crecimiento de la empresa.
- Comunicación: La capacidad que presenta un individuo para hablar en público y expresa sus ideas, tanto escrita como oralmente, permite que se lleve adelante una interacción más asertiva, facilitando el trabajo en equipo. Sin embargo, así como la persona es buena para comunicar, también debe ser buena para escuchar. Estas herramientas comunicacionales permiten entablar mejores relaciones entre colegas, a la vez que se desarrollan mejores estrategias y planes más eficaces para la empresa.
- Iniciativa: La iniciativa y la motivación son dos aspectos fundamentales, que permitirán al individuo inclinarse hacia la creatividad e innovación para que su empresa pueda crecer.
- Innovación y creatividad: Una persona profesional que posea ideas innovadoras, velará porque su empresa se encuentre actualizada. Asimismo, un profesional que sea creativo será capaz de brindar estrategias y controlará los proyectos innovadores para que los mismos sean puestos en marcha, midiendo así, los resultados obtenidos.
- Responsabilidad: La responsabilidad engloba tanto los aspectos laborales, como ser la puntualidad, el cumplimiento de los objetivos, etc. como la obligación que adquiere el individuo en función a la empresa en la que se encuentra trabajando. Esto último, implica garantizar un buen manejo de la información, la confidencialidad, la buena imagen, etc.
- Trabajo en equipo: El buen trabajo en equipo implica buena comunicación, para así, crear un ambiente laboral óptimo y los trabajadores puedan desempeñarse correctamente, de manera individua. De esta forma, es importante saber que un buen trabajo en equipo conlleva que cada trabajador aporte lo mejor de sí.
- Saber tomar decisiones: De gran importancia es el saber tomar decisiones de manera ágil y efectiva, lo cual implica saber prever las consecuencias de las decisiones a tomar. Esto le permitirá adelantarse a los acontecimientos sin tener que esperar una respuesta inmediata por parte de sus superiores. Así, el trabajador sabrá qué decisiones tomar y cuál es el momento oportuno para hacerlo, impidiendo el retraso del trabajo, tanto de él mismo como de sus compañeros.
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