La sugestión personal es la decisión de la persona misma, mediante la cual el individuo adopta los métodos que mejor le parezca para erradicar un mal hábito o adquirir otros.
Asimismo, debemos conocer que nuestro subconsciente es susceptible a la sugestión, por lo tanto, no tiene la capacidad de distinguir entre lo verdadero y lo falso.
De esta forma, es de conocimiento que la sugestión influye en gran medida en nuestros pensamientos, en nuestro accionar y en la vida cotidiana. Así, cuando anticipamos que un hecho ocurra, nuestros pensamientos y comportamientos permitirán que el resultado esperado suceda. En resumen, son las expectativas propias las que hacen posible que suceda aquello que deseamos.
La sugestión personal: el efecto placebo y el efecto nocebo
El efecto placebo es utilizado en la medicina, el mismo consta de la administración de una sustancia sin acción curativa pero que produce un efecto terapéutico si la persona lo consume convencido de que es un medicamento eficaz.
Esto funciona en la sugestión dado que la mente subconsciente intenta confirmar que aquello que pensamos, va a suceder. Por lo tanto, debemos poseer pensamientos positivos acerca de lo que realizaremos, así nuestra mente se centrará en lograrlo.
Por otro lado, el efecto nocebo también es utilizado en la medicina. Pero, a diferencia del efecto placebo, el nocebo es el efecto de una sustancia o tratamiento que pudiese provocar daños para el paciente, dado que piensa o espera que los mismos se produzcan.
¿Cómo utilizar el poder de la sugestión a nuestro favor?
En la sugestión es fundamental conocer de lo bueno y lo malo que pudiese llegar a ocurrir, estando dispuestos a enfocarnos principalmente en lo bueno. Así, generamos una imagen poderosa, positiva, evitando centrarnos en lo malo. La mente es una herramienta poderosa, la cual, nosotros mismos debemos aprender a utilizarla.
Entérate de todas nuestras noticias a través de VDC INTERNACIONAL.
No olvides seguirnos en Facebook