¿Cómo influye la dieta y el ejercicio en el riesgo cardiovascular?
El riesgo cardiovascular se puede minimizar teniendo en cuenta algunas medidas. La mejor manera de reducir el riesgo cardiovascular es adoptar un estilo de vida saludable. Los pilares fundamentales son dos: la dieta y el ejercicio. Ambos factores en conjunto son los mejores medios para prevenir todo tipo de enfermedades.
¿Qué es una enfermedad cardiovascular?
Son patologías asociadas al funcionamiento del corazón y de los vasos sanguíneos. Dentro de estas se encuentran la hipertensión, insuficiencia cardiaca, enfermedad cerebrovascular, entre otras. Es frecuente que estas sean a causa de la arteriosclerosis, una condición en la cual se acumula la grasa y el colesterol en las paredes de las arterias, lo que lleva a que estas se estrechen y causa problemas en todo el organismo. El riesgo cardiovascular aumenta ante una vida sedentaria y una dieta inadecuada.
¿Cómo influye la dieta en el riesgo cardiovascular?
Para minimizar las patologías es importante reducir el consumo de algunas sustancias. Lo indicado es reducir o eliminar alimentos que incrementan los niveles de colesterol “malo” y los triglicéridos.
Una dieta adecuada protege el sistema circulatorio al impedir que se forme placa en las arterias; además, fortalece el corazón y los vasos sanguíneos.
En términos generales, lo que se recomienda es comer frutas, verduras y hortalizas todos los días, como también frutos secos y cereales integrales.
Otros puntos a tener en cuenta:
• Limitar la sal. No se debe ingerir más de 3 gramos de sal diarios. La albahaca, el limón y el ajo son excelentes para dar sabor a los alimentos.
• Consumir pescado al menos dos veces por semana. De preferencia, pescados azules.
• Reducir el consumo de carnes rojas.
• Preferir los lácteos descremados.
• Incorporar huevos a tu dieta.
• Evitar las bebidas azucaradas.
• Elegir los aceites vegetales, como el de girasol, oliva o canola.
• Disminuir las comidas muy procesadas y las harinas refinadas
¿Cómo impacta el ejercicio en el riesgo de enfermedad cardiovascular?
Las investigaciones han señalado que la actividad física disminuye el riesgo cardiovascular.
Un estudio indicó que el cambio de una vida sedentaria reduce los riesgos entre un 15 y un 39%.
Los adultos sin antecedentes de enfermedad cardiovascular pueden comenzar un programa de ejercicios paulatino, siempre consultando con el médico.
La evidencia indica que hacer ejercicio al menos dos veces por semana se asocia con una disminución del riesgo cardiovascular, ya que ayuda a que el corazón lata con más fuerza, se mantenga el nivel de presión y disminuya el colesterol.
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