Una alimentación sana es aquella que proporciona los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo. A pesar de ello, muchos trabajadores no poseen una buena alimentación debido a sus horarios laborales, que los llevan a consumir comidas rápidas para salir del apuro.
Sin embargo, tener una alimentación saludable en el trabajo es fundamental, por ello, te contamos cómo puedes hacerlo.
Beneficios de una alimentación saludable
Una alimentación saludable en el trabajo trae consigo beneficios que resultan positivos para los trabajadores e, indirectamente, para los empleadores. Esto se debe a que, una buena alimentación incrementa la salud y desempeño de los trabajadores, disminuyendo el ausentismo y obteniendo mejores resultados, respectivamente.
Llevar una alimentación saludable y equilibrada ayuda a aumentar la vitalidad y previene la aparición de enfermedades crónicas. Asimismo, incrementa la productividad de los trabajadores, por ello, es importante que las empresas creen entornos saludables que faciliten la información y los buenos hábitos alimenticios para sus empleados.
Riesgos de una mala alimentación en el trabajo
Es común que los trabajadores, por falta de tiempo, tiendan a saltearse varias comidas al día, consuman alimentos chatarra, además de comida rápida rica en grasas. Asimismo, no respetan los tiempos de los distintos momentos para comer, a la vez que lo realizan de manera rápida para no “perder” tiempo de trabajo.
Una mala alimentación en el trabajo, deficiente y desequilibrada, en la cual los nutrientes necesarios no puedan ser administrados, puede tener como consecuencia cansancio excesivo, falta de interés y/o irritabilidad. De igual manera, el rendimiento de los trabajadores tiende a disminuir, la productividad va en picada, y pueden producirse enfermedades vinculadas con la desnutrición o la obesidad.
Por ello, es importante que los trabajadores sepan equilibrar o armonizar sus tiempos y alimentos.
Consejos para lograr una alimentación saludable en el trabajo
Es importante que las empresas fomenten hábitos saludables a fin de mejorar la alimentación, impidiendo que la capacidad de trabajo disminuya. Por ello, te ofrecemos una serie de consejos para lograr una alimentación saludable en el trabajo:
- Llevar una alimentación completa y variada para lograr, así, el mantenimiento del equilibrio del organismo.
- Cada plan alimenticio debe ser dirigido para cada persona, cada persona, en base a sus necesidades y gasto energético.
- Realizar al menos 4 comidas al día, tomándonos el tiempo necesario, sin realizarlo de forma apurada. Sin saltarnos ninguna de las comidas.
- Puedes preparar tus comidas la noche anterior, así evitas perder tiempo y consumir comida rápida. También, no olvidemos llevar tentempiés saludables de nuestro hogar.
- Ingerir la cantidad de agua necesaria por día, incrementando la cantidad en los días de calor o cuando se realiza actividad física.
- No abusemos de la sal.
- Incorporar mayor cantidad de verduras y frutas.
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